Instagram es una de las redes sociales que más se ha puesto de moda en los últimos años. La cantidad de usuarios no para de crecer mientras que en otras muchas no para de bajar o está simplemente estancada. Es por esto por lo que grandes marcas publicitarias y compañías de renombre están apostando por esta reciente red social y están llevando sus campañas de marketing aquí más que en otros lugares. Hace poco hubo una última actualización y ahora es ligeramente más difícil poder llegar a los usuarios, pero la clave para poder llegar a los usuarios es tener buenas fotografías.
Hacer buenas fotografías no es tan complicado, simplemente tenemos que tener algo de creatividad y aprender un poco acerca de la técnica. El aprender a hacer buenas fotografías y de manera más profesional en esta red social también puede convertirse en un negocio e incluso hay personas que dan cursos bastante económicos y útiles para enseñarnos a hacer fotografías profesionales.
Es muy importante que cuando hagamos una fotografía (especialmente si trabajamos para una marca) veamos qué es lo que concuerda mejor con la imagen que podemos dar. En determinados cursos de fotografía se dan las nociones básicas de composición y nos enseñan a realizar dos tipos de fotografías profesionales, las que se hacen en ambientes realistas y paisajes y aquellas que requieren un poco más de composición y se hacen con un fondo de un color más fijo.
Nos explican qué aplicaciones de edición de fotos son más útiles y sencillas de utilizar y nos ayudan para que nuestras fotografías comiencen a tener un aire más profesional, aunque estén hechas con un teléfono móvil.
Por último nos enseñan estrategias de publicación, cómo y cuándo colgar una fotografía para que ésta tenga más impacto en nuestros usuarios y pueda llegarle a más gente.