Existen áreas en la que la creación de contenidos transmedia están resultando de gran éxito para realizar campañas publicitarias y lograr atraer a una clientela llena de curiosidad y deseos de participar. Pero, ¿dónde empieza lo transmedia? ¿Qué campañas se realizan y hasta qué inversión necesitan? Estas son preguntas complicadas, pero vamos con unos ejemplos.
Series de televisión
Junto a los videojuegos, las series de televisión son la oferta de ocio que más ha crecido en los últimos años. Ver, comentar y compartir en las redes sociales cada capítulo es práctica habitual para muchos. Pero esa atracción por las series a veces viene de grandes campañas publicitarias, en la última temporada de Juego de Tronos se realizó una campaña por Canal + al más puro estilo rol, que incluía juegos en redes sociales, interacción física (ir a lugares de Madrid a realizar misiones) y acababa en un gran acto. Esto fue seguido por miles de madrileños y llegó a ocupar páginas enteras en periódicos nacionales.
Narrativas transmediales
Las narrativas transmediales suelen tener dos funciones específicas, por un lado son narraciones propias que no tienen más finalidad que sí mismos, por otro son grandes campañas publicitarias que han cogido mucho valor. La inclusión de elementos narrativos en la vida real para crear historias en los que el cliente se sienta incluido en la misma promoción. Películas como Distrito 9 o Guerra Mundial Z colocaron carteles por ciudades avisando de invasiones de zombies o elementos similares. Tratando de mezclar la realidad de la ficción con la de la ciudad. Al no anunciar directamente la película se despertaba en los ciudadanos una curiosidad. Todos sabían de qué campaña publicitaria se trataba, pero también se sentían dentro de la ficción.
La imaginación es necesaria para lograr atraer a una clientela cada vez más saturada por la publicidad, puede que las narrativas transmediales sean la solución.